jueves, 13 de septiembre de 2012

Crimen y castigo



Crimen  y castigo 

Definitivamente queda clara la relación literaria que se da entre Tolstoi y Dostoyevski. La manera similar de presentar el desarrollo de la novela es muy significativo. Es por lo tanto un estilo al que estoy perfectamente acostumbra y el cuál disfruto.
Desde luego es muy interesante la manera en que hilvana los acontecimientos con el planteamiento del personaje principal. [Raskólnikov (Rodino Romanovich)]
Me sorprendió mucho pues, que a un tercio de la novela sentía yo que había algo; una falla, de hecho grave para todo el planteamiento, y me parecía raro encontrar algo así en semejante autor.
Y vaya que era sólo la inexperiencia de no haberlo leído antes. En el momento menos pensado y de la manera más circunstancial y natural posible presenta la motivación real, su nacimiento y fundamento. Y en ese momento me quito el sombrero y empieza a adorar legítimamente a ese autor, nuevo para mi.
Me refiero desde luego a que por más trabajado y bien presentado que encontraba al personaje principal, no veía yo la razón que lo llevara a cometer el crimen. No me parecía sólida, había algo que me faltaba; incluso el autor se toma el tiempo de no soltar esa información hasta tiempo después de haberse llevado a cabo el asesinato. Una manera brillante de tener mi mente confusa, cauta y recelosa de la lectura.
La manera en que se relacionan los personajes, y cómo va acomodándolos con la paciencia de un jugador experimentado de ajedrez, es digna también de mencionarla. La forma en que un pequeño movimiento inicial afecta posteriormente el curso de la historia; y sobre todo el reducido número de personajes, para una novela tan extensa, llama también mi atención.
No pierde tiempo en presentaciones innecesarias y permite en su medida que cada personaje interprete su papel y sea llamado a escena en el momento justo, dando una solidez indiscutible a la historia en sí.
Tengo que mencionar también y con infinito placer la sorpresa que fue para mi la plática con el borracho [Marmeládov] en la taberna. Mis frases favoritas de toda la novela cayeron en la resignada cordura alcoholizada  de un personaje vital para el desarrollo de la trama.
La idea de una relectura de esa parte me llena de placer.
Y así fue. El entendimiento humano que puede tener una persona que sufre es mucho más claro, ya que ha visto el abismo ante sus ojos. No tiene que recurrir a metáforas o símbolos. La visión de un borracho (en este caso) es mucho más clara, profunda y filosa; aún envuelta en la vista nublada por la bebida.

“¿Crees tú, tabernero, que esta botella que me has vendido ha sido de mi gusto? Dolor, dolor es lo que hay en el fondo, dolor y lágrimas, que ahí he hallado y saboreado….” pag. 54,55

Magnífica explicación al comportamiento de un borracho, brillante acercamiento a una mente en decadencia, perdida hace mucho.  “...bébo porque quiero sufrir el doble de lo que sufro!... pag. 44
La naturalidad resignada con que acepta, perdona y abraza la tragedia de su vida, sabiendo que tiene una condena que cumplir. Conciente que sus actos han marchitado su entorno y sabiéndose único culpable, responsable y sin la fortaleza para hacer nada a cambio. Esperando únicamente el desenlace de esta la tragedia de su vida.
Resume indudablemente la perdición a la que lleva una vida viciosa, y redime también en cierto modo las enseñanzas que a un alto costo podemos sacar de ello.
Con esto en mente puedo decir, que ahora “entiendo” la necesidad imperiosa de un alcohólico a amarrarse y torturase en la bebida. (Es interesante saber que todas estas reflexiones las sacó, Dostoyevsky, seguramente de un proyecto abortado llamado “Los borrachos”de allí entiendo plenamente el porque la solidez de un personaje tan bien acabado y con unas reflexiones tan sólidas.
Pero las reflexiones de Dostoyevski no se limitan a la trágica vida de un solo hombre y mucho menos abarca solamente los vicios a que el hombre a estado condenado desde que se le puede calificar como tal.
Sus reflexiones recorren el género humano como el pincel de un artista un lienzo en blanco.
Lo que ha atormentado al hombre pensante; de las cuestiones más puras y básicas hasta los principios morales, filosóficos, religiosos y políticos que dan fundamento a una sociedad. Pasando desde luego por al necesaria doble moral y superstición; lo que da a la novela un sentido más amplio y es a su vez un relato más fiel de sus habitantes.
Que converjan además todas estas posturas en un personaje al que durante toda la trama se le cataloga como al borde de la locura, es un recurso muy atinado que permite al autor estirar a su antojo todas las circunstancias a su alrededor. El hecho de utilizar el recurso de los sueños en las mentes atribuladas, me hace sonreír y me demuestra lo genuino de sus ideas y la manera de presentarlas.
Hay algo más que me parece importante anotar. En mi personal lectura de la novela, me quedó claro desde un principio que el crimen que cometió Raskolnikov, fue en si mismo su castigo. Tal vez esa lectura sea sólo mi apreciación y no este sustentada del todo.
Sin embargo me llama la atención y lo menciono pues al terminar la novela, leí la nota preliminar (como siempre me gusta hacerlo, al final, para ahora sí entender del todo lo que dicen) y en este caso el que la escribió parece encontrar que en esta novela solo se habló del crimen como tal, y que posiblemente el “castigo” este destinado al relato posterior, uno que esta novela ya no abarca.
“Así, pues, la novela nos ofrece sólo la primera de las dos etapas que sugiere el título, la del crimen, en tanto que la pertinente al castigo quedaba – es de presumir – para mas adelante, si es que en efecto Dostoyevski la pensaba escribir.” Pág. 16
Y que no fue la continua tortura más que física ideológica a la que se enfrenta el personaje durante más de la mitas de la novela su más grande castigo en sí; que lo lleva a vista de los demás al borde de la locura. En un continuo forcejeo entre sus convicciones, ideas, enseñanzas, conciencia y fría realidad.
Y a pesar de que el huye constantemente a reflexiones más humanas, es cierto que ese crimen lo consume en cuerpo y alma. Pues el crimen fue, una cuestión ideológica personal, por lo que el castigo fue de igual manera interno, a nivel y no social, lo que es una confrontación al mismo pensamiento en sí.
Y que peor castigo que aceptar su derrota e irse el mismo a entregar cuando no tenía ya ninguna necesidad “social” de hacerlo. En este sentido Dostoyevski de un sentido más profundo a las decisiones trascendentales que toma el personaje de Raskólnikov; al mostrarlas plenamente sujetas a una postura interior, personal. Que van más allá de consideraciones del medio ambiente.
Así pues y con una elegancia singular hace un llamado a su conciencia en el momento que más confundido estaba; con ayuda del personaje de Marmeládov, y esas ideas son desechadas de una manera casi sublime, pues a la vez que afectan su futuro considerablemente no hace eco la advertencia casi circunstancial y sigue con su propósito.
De la misma manera, el autor da a Raskólnikov una vía de escape justo al final de la novela que lo libra de toda atadura social para aceptar su crimen. Y una vez más el personaje demuestra que ha actuado de manera personal y en realidad encontrarse culpable ante una sociedad era lo que menos le importaba. Su lucha fue siempre interna. Y el entregarse solo era la consecuencia lógica de darse cuenta,  mostrando que no es el miedo a ser descubierto lo que lo motiva a entregarse. Su motivo es más profundo, atemporal, y no dependía de circunstancias externas sino todo lo contrario.
Su castigo no es pues los años que pasa en Siberia, su castigo es para mi punto de vista darse cuenta que estaba equivocado en sus ideas, que no fue capaz de cometer el crimen y dar el siguiente paso. Y sin eso, todo lo demás es en vano.
Es por eso pues que la segunda etapa de su vida no era ya motivo de esta novela y estas reflexiones. Pues ella traería en si misma nuevas ideas y teorías que no era asunto de esta novela mencionar.
Mi último pensamiento, no por eso menos importante, sobre esta novela es el siguiente; No puedo evitar notar en los grandes autores unos temas y posturas recurrentes.
Son ellos entonces los que de diferente manera y a lo largo de los años nos recuerdan que a las grandes tragedias humanas e individuales no podemos entenderlas y sobrellevarlas si no tenemos algo en que creer.
Pues lo humano; bueno o malo, acaba, muere. Pero lo que hace a la humanidad ir más allá siempre y en todas las culturas es refugiarse en eso en lo que cree.

(les anexo una breve bibliografía)


Fiódor Dostoievski

 Novelista ruso. Educado por su padre, de carácter despótico y brutal, encontró protección y cariño en su madre, que murió prematuramente. Al quedar viudo, el padre se entregó al alcohol
A los dieciocho años, la noticia de la muerte de su padre, torturado y asesinado por un grupo de campesinos, estuvo cerca de hacerle perder la razón. Ese acontecimiento lo marcó como una revelación, ya que sintió ese crimen como suyo, por haber llegado a desearlo inconscientemente
En 1849 fue condenado a muerte por su colaboración con determinados grupos liberales y revolucionarios. Indultado momentos antes de la hora fijada para su ejecución, estuvo cuatro años en un presidio de Siberia, experiencia que relataría más adelante en Recuerdos de la casa de los muertos
En 1866 publicó El jugador, y la primera obra de la serie de grandes novelas que lo consagraron definitivamente como uno de los mayores genios de su época, Crimen y castigo.

(Fiódor Mijailovich Dostoievski, Moscú, 1821-San Petersburgo, 1881)


2 comentarios:

  1. vaya que interesante se ve el libro ,nunca habia oido nombrar a ese autor :?. pero ya me intereso el libro voy a buscarlo, me gustaria que nos hicieras recomendaciones de libros de todo tema pero asi por generos :)

    att edith :3

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  2. Lo leí hace muchos años, lo encontré en el librero que mi papi dejo lleno antes de fallecer, como era pequeña (tenia 8 años) no pude oponer resistencia y varios de mis familiares tomaron muchos de esos libros prestados y nunca los regresaron. A mis 11 o 12 años leí este libro, también La Madre y algunos otros de escritores rusos, creo que me debo el releerlos, me ha pasado mucho que después de varios años de haber leído un libro lo releo y encuentro diferente mi lectura, tal vez por las experiencias vividas. Muchas felicidades por tu análisis del libro y que bueno que te animaste a crear este blog, ojala estés compartiendo tus lecturas muy a menudo.

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